
Nuestra Historia
En 1880, en Cuba, nacieron Frank y Alberto Plata Ramos, hijos de colonos españoles. De niños, observaban con anhelo a otros jugar con caballitos de madera, un juguete fuera de su alcance. Fue entonces cuando Frank prometió a su hermano: “Un día vamos a tener nuestro propio caballito de madera.”
Movido por ese sueño, Frank comenzó a trabajar en una farmacia que más tarde sería reconocida por la UNESCO. Tras años de esfuerzo, él y Alberto emigraron a EE.UU., donde Frank entró a trabajar en una fábrica hasta convertirse en Gerente Ejecutivo. Sin embargo, los hermanos soñaban con crear algo propio.
En 1925, viajaron a Argentina y fundaron EUREKA, inspirados por su pasión por el arte y la escritura. Un año después, cumplieron su promesa: consiguieron su caballito de madera, que colocaron como símbolo de la marca, junto a la célebre frase: “Eureka, lo encontré.”
Desde entonces, EUREKA ha desarrollado productos como tintas, tizas, óleos pasteles y borra tintas, comprometidos con acompañar el proceso creativo de cada artista. Hoy, bajo la cuarta generación familiar, seguimos ofreciendo productos de excelencia para mantener vivo el legado de creatividad y pasión que nos vio nacer.